lunes, diciembre 03, 2007

Ni tanto que queme al santo…

…ni tan poco que no lo alumbre.

Rememorando esta reflexión popular es que pretendí encontrar la vuelta a lo sucedido ayer en la República Bolivariana de Venezuela, en el marco del Referéndum Democrático de un gobierno a quienes muchos acusan de “dictatorial” pero que ayer dio una cabal muestra de como se practica la verdadera democracia.

Muchas cosas fueron pasando simultáneas a los preparativos de la convocatoria en la que se encontrarían dos posiciones antagónicas: la de la oligarquía pro-gringa que dice NO a todo proyecto a favor del pueblo, y la del pueblo que reedita el patriotismo de un Simón Bolívar que no pudo cumplir su sueño de la Patria Grande Latinoamericana, traicionado por la oligarquía de entonces, tan traidora como la actual y tan cómplice de genocidios como ésta.

Entre las cosas que se fueron desarrollando y no por casualidad, apareció una llamada “Operación Tenaza”, documento clasificado como “Confidencial” emanado de un tal señor Michael Middleton Steere, funcionario de la Oficina de Asuntos Regionales de la CIA.

Este siniestro personaje que vive dentro de la Embajada de USA en Caracas, confía su documento al director de la CIA, General Michael Hayden, describiendo el “avance de la fase final de la Operación”, que está dentro del contexto de los hechos contra revolucionarios que se vienen ejecutando en perjuicio de la República Bolivariana, confirmando por otra parte, que están entrando en la etapa final del Plan.

La CIA aseguraba una ventaja irreversible a la posición del Sí antes del proceso electoral, es por esto que la nada despreciable cifra de 8 millones de dólares fue destinada para operaciones psicológicas, cobertura de la prensa nacional e internacional y campañas de desprestigio muy fuertes.

Ante la “indudable” victoria del proyecto bolivariano, llamaron a desconocer los resultados finales, aunque previamente debían ejecutarse acciones tendientes a evitar directamente el Referéndum, hecho abortado a partir del descubrimiento de esa Operación Tenaza.

Se trató, además, de provocar un levantamiento general de una parte de la población, tomar la calle con Guarimbas y “candelitas” que hoy se habrán guardado en alguna parte íntima de su anatomía, ya que fue evidente, ante el mundo, la democracia del gobierno que a altas horas de la noche y mientras el mundo bolivariano mordía hasta sus codos para calmar la incertidumbre, no demostró sino un gran acto de democracia innegable aceptando la “victoria” por escasísimo margen, pero victoria al fin, de los trabajadores por el NO.

Ahora bien, para los amantes de la “libertad y la democracia” de pacotilla, subvencionada por la CIA y la embajada USA, de haber sido al revés, o sea, si el triunfo era para el Sí bolivariano, la directiva era:

Denunciar fraude.

Tomar las calles.

Aislar a Chávez en el ámbito internacional.

Unificar a la oposición, apoyarla con acciones armadas y terminar las preparaciones operativas en las bases militares de Colombia y Curazao.

¿Y quiénes eran los encargados de esas y otras medidas similares a desarrollar si el Sí resultaba vencedor? Pues nada más ni nada menos que:
la oficina de la CIA en Venezuela, con Michael Steere a la cabeza.

El embajador Patrick Duddy.

La oficina de Defensa, Ataque y Operaciones (DAO) de la Embajada de USA en Venezuela junto al oficial Richard Nazario.

Asimismo participarían de la “fiesta agresora” una serie de personajes en conjunto con las agencias y medios internacionales, los Rectores de la Universidad Simón Bolívar, “señores demócratas” Rudolph B. Scharikker Pdolski y de la Universidad Católica.

Varios estudiantes serían la fuerza de choque, muy preparados por cierto por la CIA, junto a otras organizaciones políticas.

En los días previos al Referéndum Constitucional, se tensaron las relaciones con el gobierno colombiano, el que aceptó sumisamente reforzar las bases militares cerca de la frontera colombo-venezolana.

Recordemos que Colombia permitió la instalación de tres bases militares gringas, así como la instalación de más de 15 estaciones de radares desparramados por el país custodiados por más de 35 soldados yanquis junto a los colombianos.

EEUU en unidad con la CIA y el Pentágono sueña con fortalecer a sus “aliados” en Venezuela para apoyar con armas las movilizaciones callejeras.

Si unimos la totalidad del proyecto estamos en condiciones de asegurar que de haber ganado el Sí hoy la República Bolivariana se encontraría frente a una gravísima realidad, que el margen de ínfima diferencia (NO 50,70- SI 49,29) logró evitar.

Por otra parte hubo un hecho también muy relevante que se publicó ayer, en pleno ejercicio democrático venezolano y desarrollado en la vecina Colombia. Donald Rumsfeld llamó a aprobar el Tratado de Libre Comercio para neutralizar a Hugo Chávez.

Según este personaje, aliado del criminal George Bush e ideólogo de la invasión y ocupación de Irak, bajo mentirosos argumentos jamás demostrados, exige premura la decisión de “golpear a tiranos como Chávez” y esta inquietud está impresa en las páginas de “The Washington Post”, donde además publican que “el mundo libre tiene muy pocas herramientas para ayudar a prevenir que la una vez vibrante democracia venezolana retroceda en una dictadura” {sic} y uno de los pasos fundamentales sería precisamente, la aceleración y firma del TLC en Colombia.

Todo ello, según el halcón devenido en simple cuervo a partir de la derrota electoral en las elecciones legislativas de EEUU, hecho que provocó su dimisión como Secretario de Defensa y del sitial que ocupaba en el Pentágono y que necesitaba de una nueva cara frente a semejante derrota.

Rumsfeld, siente repulsión cuando alguien menciona el nombre Chávez, fácil es intuir que mucha más sentirá cuando se adentra en lo que representa la patriótica voluntad bolivariana, de todas las formas tratará de eliminar y borrar de la faz de la tierra ese proyecto que tanto les perjudica. De ahí que cuando se dirige al mandatario bolivariano lo describa como violento, artífice de un estado endeble y rufián, déspota y vaya a saber cuantos adjetivos más…

Estamos en plena ejecución de una guerra asimétrica alimentada cada día con más fuerza por el “orden imperial”, de todos modos cuando los pueblos ven el resplandor de la Espada de Bolívar recorriendo el continente, no ven precisamente visiones.

El referéndum de ayer en Venezuela, el escasísimo margen que le dio la ¿victoria? a la oposición, -me acojo al beneficio de la duda-, ¿no habrá detenido un inminente baño de sangre en un momento convulsionado y donde como siempre, las víctimas las pone el pueblo?

Por ello es que respecto al NO-SI simplemente me repito: ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre…, muchas veces el pasito hacia el costado es lo que precede al gran avance y no podemos minimizarlo.

La historia siempre deja caer su velo, no será hoy ni mañana, sino cuando haga falta, pero la Revolución Bolivariana sigue su curso y ya lo dijo el Comandante en su discurso de la madrugada del 2 de noviembre de 2007, será “por ahora”…

Lo que ya nadie podrá decir es que en Venezuela rige un régimen antidemocrático, de ahora en más y ante lo que suceda, porque el proyecto bolivariano sigue su curso de humanismo heroico, los detractores hoy “triunfalistas” podrán ir a llorar a la iglesia.

A esa misma iglesia, en Caracas, donde se elaboró una reunión para ultimar detalles llamando a desconocer los resultados electorales que el Consejo Nacional Electoral transmitiría si acaso el pueblo avalara el SI.

“Casualmente” tal como lo propuso la CIA…

Ingrid Storgen.

Noviembre de 2007



No hay comentarios.: